miércoles, 12 de febrero de 2014

Alba y el sueño de una Madre


CUANTO CUESTA UN SUEÑO?

Eso depende, depende de las veces que hayas soñado con él, del tiempo que lleves esperándolo, ansiándolo, soñándolo, de las veces que casi casi lo hayas rozado con la punta de los dedos y sobretodo depende…depende de que ese sueño, que esa “cosa” con la que sueñas no sea para ti, sea para la persona que más quieres en este mundo y sobretodo depende, del tiempo que lleves imaginando lo que esa personita sentirá el día que alcance ese sueño, aunque ella todavía no sepa que es un sueño, no sepa que quizás algún día rodeada y sujeta por esos horribles hierros y cables pueda llegar a hacer lo que siempre ha querido hacer, la cosa que más le gusta del mundo desde que era chiquitita, muy chiquitita, siempre ha querido andar, es lo que más te gusta Princesa, poder andar, te vuelves loca loquísima, sales tan rápido, tus pies no dan un  paso en firme porque más bien vuelan, siempre lo recordaré, desde siempre te ha encantado, desde siempre llevamos tu padre y yo intentando poderte adaptar algo, no sé, alguna bici, algún aparato que te haga la misma ilusión que te hace poder andar pero nunca hemos conseguido nada que a ti te calme esas ansias que son innatas en ti y que no podemos calmar.

Hace mucho tiempo que lo vi, exactamente 5 años, bueno ahora 6 porque ya has cumplido los 9 añitos, ese andador y creí haber encontrado tu regalo perfecto, creía que nadie se había dado cuenta de que existía esa posibilidad, la de que tu andaras, nadie menos yo, lo tengo tan metido en la cabeza o quizás en el corazón que aunque llevan mucho tiempo diciéndome que esperara, que no era el momento, tu momento, que no podía ser, que primero tu cuerpo se debía poner de pie, primero, después caminar, bueno pues ahí aguantando hemos estado tu y yo, aguantando, puesta de pie tu y yo poniéndote religiosamente cada día en casa y cada día religiosamente que te ha puesto en el Cole tu Juli, ahora ya nos dejan, los médicos, los fisios, ahora han dicho que lo podemos probar y lo hacemos, lo probamos, y tu ni siquiera te diste cuenta de que ese aparato te podía ayudar a andar sin mi, sin mis brazos sujetando tu cuerpo, no lo entendiste porque ese aparato, como casi todo lo que hemos encontrado en estos 9 añitos, no está hecho para ti, no está hecho para que mi preciosa Princesa pueda andar, porque esos señores que lo han hecho se han olvidado de que tienes dos hermosas y fuertes piernas que te permiten andar pero que tu cabecita no es capaz de acompañar esos esperados pasos, el otro día el ansiado sueño soñado no se convirtió en realidad, pero como en todos los cuentos seguiremos esperando que llegue el Príncipe o los Príncipes que sean capaces de conseguir que ese aparato también sea para ti y te puedo asegurar cariño mío que hasta que no lo consiga no voy a parar. Prometido queda y andarás, aunque todavía no los sepas, andarás, porque es tu sueño y como dice esa bonita frase, NO SABÍA QUE ERA IMPOSIBLE Y LO HIZO…

 

Te quiero amor mío hasta más arriba del Cielo, hasta el infinito y volver y volver y volver…..